Tefilin (Filacterias)

El mandamiento Bíblico que los Rabinos interpretan que se refiere a los Tefillin (Filacterias) es considerado por los Caraítas como una metáfora que recalca la importancia de recordar y apreciar la Torah.

Un mito popular afirma que los Caraítas, y los Saduceos antes que ellos, interpretaban las palabras «y estarán como Totafot [vea debajo] entre vuestros ojos» en sentido literal y como resultado llevaban los Tefillin (Filacterias) justo sobre sus narices. Una versión de la historia afirma que los Saduceos desaparecieron debido a esta práctica. El mito cuenta que se tropezaban con las paredes y puesto que sus Tefillin estaban entre sus ojos (en lugar de en sus frentes), sus narices se les incrustaban en los sesos, matándolos al instante. Los Caraítas y otros que rechazaban la «Ley Oral» son descritos como idiotas ineptos que a través de sus estúpidas prácticas se extinguieron. El mensaje de esta historia es que es imposible vivir (literalmente) como un Caraíta y en consecuencia necesitamos la «Ley Oral» para salvarnos de esta salvaje extinción.

El problema con este mito es que es absolutamente falso. Presupone que los Caraítas y los Saduceos interpretan que el versículo «y estarán como Totafot entre vuestros ojos» se refiere a las Filacterias Rabínicas. Sin embargo, en realidad los Caraítas y los Saduceos nunca jamás llevaron Tefillin, simplemente “entre vuestros ojos” no es lo que el versículo está diciendo. Un polémico Rabanita preguntó, ‘¿Cómo pueden Uds. Caraítas saber como se hacen los Tefillin sin ninguna de las especificaciones de la «Ley Oral»?’. La respuesta es que no podemos puesto que todo esto es una composición de la «Torah Oral».

La frase que según se alega ordena ponerse Tefillin aparece cuatro veces en la Torah (Ex 13,9; Ex 13,16; Dt 6,8-9; Dt 11,18). Debe hacerse notar que la difícil palabra «Totafot» que los Rabinos arbitrariamente interpretan como «Tefillin», realmente significa «Recuerdo». Esto resulta claro a partir de Ex 13,9 (uno de los cuatro pasajes sobre los «Tefillin») que substituye a la palabra «Totafot» con el término equivalente pero más familiar «Zicharon» (Recuerdo).

Con un examen más profundo resulta claro que esta frase es un recurso estilístico y no un precepto en absoluto. El brillante comentarista Rabanita Rashbam (nieto de Rashi) fue lo suficientemente sabio como para comprender el verdadero significado de esta expresión. Haciendo un comentario sobre el versículo «Te será como una señal en la mano y como un recuerdo (Zicharon) delante de tus ojos» él escribe:

«‘Como una señal en vuestra mano’ de acuerdo a su llano significado (Omek Peshuto), ‘serán siempre recordadas COMO SI las llevaras escritas en vuestra mano’ SIMILAR A ‘Ponme como un sello en vuestro corazón’ (Cantar de los Cantares 8,6). ‘Entre sus ojos’, COMO una pieza de joyería o cadena de oro que la gente se pone en la frente para decoración » (comentario de Rashbam sobre Ex 13,9)

El nieto de Rashi interpreta correctamente el «pasaje» de Tefillin como una metáfora que reclama que recordemos siempre la Torah y la valoremos como una joya exquisita. Rashbam y los Caraítas comprenden que no todo en la Torah debe ser tomado literalmente como un mandamiento. El ejemplo clásico de esto es «Y circuncidaréis el prepucio de vuestro corazón » (Dt 10,16). Obviamente Dios no está ordenando ningún suicidio en masa, más bien está ordenándonos que circuncidemos el prepucio de nuestro corazón figuradamente, es decir que quitemos la impureza y obstinación y nos comprometamos con su convenio de todo corazón. Mientras que esta metáfora resultaba fácil de entender, es menos obvio qué tipo de metáfora subyace bajo «Te será como una señal en la mano y como un Recuerdo delante de tus ojos». Esta pregunta se aclara en pasajes de otras partes de la Biblia Hebrea:

«Escucha, hijo mío, la instrucción de tu padre y no abandones la Torah de tu madre, porque adorno de gracia serán en tu cabeza, y collares en tu cuello.» (Prov 1,8-9)

«Nunca se aparten de ti la misericordia y la verdad: átalas a tu cuello, escríbelas en la tabla de tu corazón». (Prov 3,3)

«Guarda, hijo mío, los Mitzvot de tu padre y no abandones la Torah de tu madre. Átalos siempre a tu corazón, enlázalos a tu cuello.» (Prov 6,20-21)

A la luz de estos versículos el significado real del pasaje sobre los «Tefillin » resulta claro:

«Estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón… Las atarás como una señal en tu mano, y estarán como frontales (Totafot) entre tus ojos; las escribirás en los postes de tu casa y en tus puertas.» (Dt 6,6-9)

La Torah debe ser como una fina pulsera o collar que llevamos orgullosos. En otras palabras, se supone que la Torah es preciosa para nosotros y debe ser recordada siempre. Hay que decir que de los cuatro lugares en que la Torah usa esta expresión en dos está diciéndonos que recordemos la Torah (Dt 6,8-9; Dt 11,18) mientras que en los otros dos está ordenándonos que recordemos el Éxodo de Egipto (Ex 13,9; Ex 13,16). Debe hacerse notar que los Caraítas también interpretan el versículo «las escribirás en los postes de tu casa y en tus puertas» (Dt 5,9; Dt 11,20) como una metáfora equivalente a «escríbelas en la tabla de tu corazón». (Prov 3,3) y no como refiriéndose a la Mezuzah Rabanita.